Creo firmemente que cada uno de nosotros alberga un relato personal que, al ser compartido, tiene el poder de inspirar a otros. No busco la fama a través de mis éxitos; más bien, aspiro a que mi existencia sirva como una demostración de lo que la creencia, la educación y el servicio desinteresado pueden alcanzar desde la sencillez.
¿Cuáles han sido tus logros destacados y que aprendizaje compartirías de estos?Cuando me preguntan sobre mis éxitos, suelo responder con cautela, porque más que logros, los veo como dones celestiales que han guiado mi camino. El mayor regalo ha sido hallar a Dios y permitir que habite en mi ser, dando propósito a mi existencia y dirigiendo mis pasos hacia el servicio pastoral y educativo. He tenido la fortuna de trabajar en variados rincones de Ecuador, difundiendo la fe y el conocimiento. Tanto en los Andes como en la costa, he apoyado a chicos llenos de aspiraciones.