Mi rol como docente durante estos 6 años, me ha permitido desarrollar en mis estudiantes habilidades críticas y analítica, fomentando en ellos un pensamiento reflexivo y ético. He procurado implementar algunos métodos pedagógicos que prioricen el diálogo y el análisis profundo de la realidad personal y social, más allá de la simple transmisión de teorías, llevando a construir en mis estudiantes una vida más consciente y reflexiva, consolidando de esta manera un enfoque integral de la educación.
¿Cuáles han sido tus logros destacados y que aprendizaje compartirías de estos?Durante seis años consecutivos, he sido organizador del Simposio de Filosofía e Investigación del GWMK, promoviendo el pensamiento crítico y la investigación entre los estudiantes. En mi Maestría en Educación y Docencia, mantuve un promedio de 10, reflejo de mi compromiso con la excelencia académica, y esfuerzo que fue reconocido con el Premio Ignacio Guerra Pellegaud, el máximo galardón de la UTEL en Excelencia Académica, que reafirma mi dedicación a la enseñanza y la formación continua.