Desde los 16 años, dejé mi hogar con poco dinero prestado para vivir. Viví solo en una fría habitación, trabajando como mesero y vendiendo crispetas para poder seguir adelante. A pesar de pasar días con poco o nada para comer, nunca dejé de luchar por mis sueños. Tengo 25 años, sigo adelante a pesar de no tener dinero suficiente para cubrir mis necesidades básicas, pero me esfuerzo por estudiar y siempre tener un techo, para ser alguien a quien mi familia pueda estar orgulloso y poder apoyarlos
¿Cuáles han sido tus logros destacados y que aprendizaje compartirías de estos?Logré mantenerme en la universidad y completar una doble titulación mientras trabajaba para sobrevivir, aprendí, viví, soñé y lo sigo haciendo. Publiqué dos libros conjuntos en 2021 sin recibir regalías, y aunque sigo enfrentando dificultades para publicar más, no me rindo. He aprendido que, aunque la vida sea dura, nunca debemos dejar de luchar por nuestros sueños. Mi mayor logro es no haberme rendido, ya que quiero ayudar a mi familia, salir adelante y ser feliz junto a las personas que amo.